Decorar dormitorios:Es tarea fácil y económica

El dormitorio es la habitación de la casa donde nos sentimos mimados, cómodos y relajados. Por eso, su decoración debe resultar muy personal.

Los colores vivos o "atrevidos" son una tentación de la que es difícil librarse si no es cayendo en ella alguna vez para la decoración de dormitorios. Si se dispone de un espacio intensamente iluminado por la luz natural (una galería o terraza resguardada, por ejemplo), este verde manzana sobre un muro texturado y grabado nos brindará una luminosidad intensa y desenfadada, ideal para las plantas y las flores.

MATERIALES NECESARIOS PARA DECORACION DE DORMITORIOS

• Pasta de estuco
• Rodillo de estucar
• Cordel
• Espátula
• Látex
• Colores acrílicos verde y amarillo
• Brocha mediana

¿Cómo hacer una decoración de dormitorios?

1 La pared sobre la que vamos a trabajar debe estar pintada en un tono que contraste con el color final, para que ese tono aparezca al abrir los surcos del friso. En nuestro proyecto hemos elegido un tierra rosado. Utilizando un rodillo de estucar extendemos una capa gruesa y espesa de pasta de estuco.

2 El acabado típico y convencional del rodillo no nos interesa: allanamos las granulosidades pasando sobre ellas la brocha en distintas direcciones para que las cerdas dejen surcos sobre el estuco. Las pasadas deben ser suaves y rápidas.

 3 Cuando esté lista la banda que ocupará el friso, se tiende un cordel a ras de pared, en horizontal, de lado a lado del muro y se presiona levemente sobre el estuco fresco para que deje una huella que servirá de guía al grabar el friso. Esta huella apenas será visible en el resultado final.

4 Utilizando una espátula dentada de diez púas, se graban los círculos del friso girando la espátula como si fuera un compás alrededor de un punto colocado sobre la línea marcada con el cordel. Los surcos tienen que dejar visible el color del fondo. Dejaremos secar el estuco durante 6 o 7 horas.

Debe tenderse el cordel con rapidez, antes de que el estuco comience a endurecerse. Para ello lo mejor será contar con un ayudante que tense el cordel por uno de los extremos. Esta operación tiene que ser rápida para no demorar el grabado del friso.

Es aconsejable trabajar por zonas, estucando 1 m2 aproximadamente y pasando a continuación la brocha. La zona o banda destinada a contener el friso debe dejarse para el final, evitando así que se endurezca antes de aplicar la espátula dentada.

5 Para conseguir un pintado suelto y transparente, se aplican primero pinceladas de color cremoso para, a continuación, disolverlas y extenderlas con la brocha cargada de agua, como si se pintase a la acuarela.

6 Siguiendo la técnica de disolución del color, va cubriéndose la pared con pinceladas en distintas direcciones, cargando más el color cuando quede demasiado transparente y añadiendo agua cuando resulte demasiado opaco.
7 Al llegar a la zona del friso, debe trabajarse con cuidado para no tapar el color que aparece en los surcos. Esto se consigue dando ligeros brochazos sobre el friso en sentido vertical y horizontal, sin insistir y con el color bastante diluido en agua. Puede aplicarse una segunda capa, también diluida, cuando la primera esté completamente seca.