Pues lo primero que debes hacer es escoger un lugar de la casa en donde sea fácil guardar esas botas y sean accesibles para que las saques, te las pongas y toda tu apariencia esté lista. Esta clase de calzado tiene a caerse de lado y no mantener su lugar cuando intentas ponerlas de pié, por lo que puedes comprar un accesorio especial que les mantiene la forma y en su lugar, que puedes conseguir en las tiendas especializadas en accesorios del hogar.
También puedes intentar poner una banda elástica alrededor de cada par o poner un clip en la parte que queda frente a frente de las botas para que mantengan mejor el balance, pero debes poner cuidado de que ninguna vaya a dejar marcas en el cuero o cualquier otro material de las botas, y ya estando juntas las puedes parar en una esquina o cualquier lugar que escojas para ellas.
También puedes ponerlas en un canasto que tenga una abertura en frente para que puedas ver cuando te las vayas a poner o poner cada par en una caja. Una buena idea es ponerlas en la caja en la que venían, pero asegúrate de poner una foto de las botas en ella para que sepas cual y es cual y no tengas que estar destapando todas las cajas siempre para ver cual es el par que está dentro.
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