La cocina es una de los lugares de la casa que más utilizamos y que sufre más daños debido al ajetreo cotidiano que recibe, a las grasas, humos y vapores que acumula día a día. Aunque nos esforcemos en realizar una limpieza a fondo todas las semanas, con el paso del tiempo sus muebles van perdiendo su color original, amarillean e incluso pueden llegar a agrietarse de tanto abrir y cerrar sus puertas y cajones.
Para cambiar nuestros muebles de cocina sin comprar otros nuevos, vamos a pintar los muebles de cocina en casa. La decoración con pintura es la alternativa más económica para dar una aire nuevo y limpio a cualquier estancia o mueble que se nos ocurra
Si tienes muebles de madera
Si lo que tienes son muebles de cocina en madera, puedes seguir los siguientes pasos para dar un color nuevo a la estancia,usando el barnizado. En este caso has de elegir una imprimación selladora.
- Lija la superficie finamente siempre en dirección a las vetas de la madera
- Aplica una laca tapa poros. Deja secar media hora y repite la operación 2 veces más.
- Ahora aplica el barniz elegido ya sea brillante, satinado o mate. Deja secar y repite este paso al menos dos manos más.
Si se trata de muebles de madera de pino que quieres teñir, aplica el tinte antes de la laca tapa poros ya que de lo contrario no sería absorbido por la superficie.
Si se trata de muebles de melamina pintar con base látex:
- El primer paso es quitar el satinado de la superficie, que se logra lijando con lija fina o lija al agua seca, obteniendo la porosidad necesaria. Una manera de saber hasta cuándo lijar, es observando que la superficie lijada, haya perdido el brillo, tornándose opaca.
- Quitar el polvillo con un paño húmedo y dejar secar.
- Dar una base con dos manos de pintura látex, dejando secar entre capas. Esta pintura es la acrílica común que se usa para pintar paredes, y es de base acuosa. Es conveniente que sea color blanco, para que no modifique el color de la pintura definitiva.
- Finalmente, pintar con el color elegido, pudiendo usar esmalte sintético, u otra pintura para interiores. Lo aconsejable en el último caso, es dar dos manos de barniz protector, que puede ser acrílico o poliuretánico.
Nota: para que no queden rastros de pinceladas, este trabajo queda perfecto utilizando un soplete, pero de no contar con esta herramienta, se sugiere usar un rodillo, en lugar de pincel
Otra opción pintar los muebles de melamina con base convertidor:
- Al igual que en el procedimiento anterior, es necesario abrir los poros, lijando suavemente toda la superficie.
- Quitar el polvillo con un paño húmedo y dejar secar.
- Dar una base con dos manos de convertidor de óxido, dejando secar entre capas. Esta pintura es la que se usa para pintar superficies de hierro, con muestras de oxidación, ya que otorga viscosidad a la superficie. Es conveniente que sea color blanco, para que no modifique el color de la pintura definitiva.
- Como último paso, pintar con esmalte sintético o pintura látex, del color elegido. También se puede aplicar cualquier técnica de las conocidas con pintura para decoración. Si se pinta con látex, proteger con barniz.
Nota: esta técnica es recomendable cuando se quiere pintar una superficie de plástico rígido.
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